¿Qué son los Antecedentes Personales Patológicos? [Ejemplos]

Como parte del historial clínico es necesario entender los antecedentes personales patológicos (APP). Tománadolos en cuenta un médico tendrá la información más completa para poder realizar un diagnóstico más claro y planificar el seguimiento de atención. 

En este artículo te explicamos cuáles son los antecedentes que se deben tomar en cuenta y aportaremos diferentes ejemplos de cómo pueden incidir en un análisis profesional. 

¿Qué son los antecedentes personales patológicos?

Son aquellos elementos de la historia clínica de un paciente que describen su historial médico previo. Toma en cuenta las enfermedades, afecciones o eventos médicos que ha experimentado en el pasado.

Estos pueden abarcar desde diagnósticos específicos hasta procedimientos médicos, hospitalizaciones previas, alergias medicamentosas, enfermedades crónicas, cirugías anteriores y cualquier otro acontecimiento médico significativo en la vida del individuo.

¿Cómo se obtienen estos antecedentes?

La recopilación de información sobre los APP se realiza típicamente durante la consulta médica inicial y durante cualquier seguimiento médico posterior. Puede tomarse nota por medio de una entrevista al paciente.

En algunos casos es el paciente quien llena un formulario que completa antes de su consulta. En caso de que el paciente haya sido tratado previamente en otras instalaciones médicas, el médico puede solicitar los registros médicos anteriores.

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¿Por qué son importantes los antecedentes? 

La importancia de indagar exhaustivamente sobre los APP radica en varios aspectos cruciales que te compartimos a continuación.

Diagnóstico preciso

Conocer la historia médica de un paciente proporciona al médico una visión más completa de su estado de salud actual. Los antecedentes patológicos pueden contener pistas vitales que ayudan al profesional a realizar un diagnóstico preciso y acertado. Al comprender las condiciones médicas previas del paciente, el médico puede identificar posibles factores de riesgo, patrones de enfermedad y complicaciones potenciales.

Planificación del tratamiento

La información sobre los antecedentes personales patológicos es esencial para diseñar un plan de tratamiento adecuado y personalizado.

Al conocer las enfermedades crónicas, alergias o reacciones adversas a medicamentos que ha experimentado el paciente en el pasado, el médico puede evitar tratamientos contraindicados y seleccionar opciones terapéuticas más seguras y efectivas.

Prevención y manejo de enfermedades

Los antecedentes personales patológicos también son fundamentales para la prevención y el manejo de enfermedades a largo plazo. Conocer las condiciones médicas previas del paciente permite al médico implementar estrategias preventivas específicas, realizar un seguimiento adecuado de las enfermedades crónicas y anticiparse a posibles complicaciones.

Seguridad del paciente

Al recopilar información detallada sobre los antecedentes personales patológicos, el médico puede garantizar la seguridad del paciente durante los procedimientos médicos, intervenciones quirúrgicas y prescripciones de medicamentos.

La prevención de interacciones medicamentosas adversas y la gestión adecuada de las condiciones médicas preexistentes son aspectos cruciales para brindar una atención médica segura y de calidad.

La diferencia con los antecedentes personales No Patológicos

Si bien son otros antecedentes a tomar en cuenta, en el caso de los No patológicos estos antecedentes comprenden información sobre la vida del paciente que no está relacionada con enfermedades o afecciones médicas.

Incluyen aspectos como el estado civil, ocupación, nivel educativo, hábitos de sueño, historial de viajes, exposiciones ambientales, entorno familiar y social, entre otros.

Ejemplos de APP

Para entender mejor cuáles son los diferentes tipos de antecedentes personales patológicos te compartimos algunos ejemplos que son de los más vistos por los médicos. 

Enfermedades crónicas

Diabetes mellitus tipo 2, hipertensión arterial, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma bronquial, enfermedad renal crónica, artritis reumatoide, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, entre otras.

Afecciones cardiovasculares

Infarto de miocardio previo, angina de pecho, insuficiencia cardíaca congestiva, arritmias cardiacas, enfermedad arterial periférica, accidente cerebrovascular (ACV) previo, trombosis venosa profunda (TVP) o embolia pulmonar (EP).

Historial quirúrgico

Cirugía de bypass coronario, cirugía de reemplazo articular (por ejemplo, reemplazo de rodilla o cadera), apendicectomía, colecistectomía (extracción de la vesícula biliar), cirugía de derivación gástrica, entre otros.

Alergias medicamentosas

Alergia a la penicilina, alergia a los AINEs (antiinflamatorios no esteroides), alergia a la sulfa, alergia al látex, entre otras.

Trastornos mentales

Depresión mayor, trastorno de ansiedad generalizada (TAG), trastorno bipolar, esquizofrenia, trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), entre otros.

Historial de cáncer

Cáncer de mama, cáncer de próstata, cáncer colorrectal, cáncer de pulmón, cáncer de piel (melanoma), cáncer de tiroides, linfoma, leucemia, entre otros.

No está de más recordar que es crucial que el médico realice una evaluación completa de la historia clínica de cada paciente para brindar una atención médica adecuada y personalizada.

Historia clínica digital

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender mejor qué son los antecedentes personales patológicos.

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